No alces la voz !mi amor¡
que le vas ha despertar,
déjale dormir su sueño
que a nadie le hace mal.
Hay sueños, que dan miedo
y no se deberían soñar.
Hay sueños que, alegran la vida
y no se quieren olvidar.
Yo sueño...cuando no quiero soñar,
y cuando quiero...no puedo,
despierto debo soñar.